Orgullosamente Mexicana de nacimiento, tras haber emigrado del lugar natal debido a las circunstancias y necesidad de salir adelante; la número 10 de una numerosa familia; que en sus niñez no contaba con juguetes caros, y mucho menos electrónicos; que su pasatiempo preferido cada dia después de haber asistido a la escuela , ayudar a su madre en los quehaceres del hogar de acuerdo a su edad (y esto movido por el amor y consideración a ella), era jugar a las escondidas, los encantados, a la matatena, con sus hermanos@s, y unos cuantos amigos que mis padres permitían que frecuentáramos, pues no todos eran de confiar según recuerdo ellos nos decían; y esto bajo la supervisión de un adulto.
Todavía recuerdo las reuniones familiares en casa durante semana santa; eran días de meditación y gozo en la que todos nos esforzábamos por estar felices; mi madre y hermanas mayores cocinando los platillos para compartir; mi padre se apresuraba por llegar a casa y cesar toda actividad después de las 12 del día pues el ayuno terminaba y era hora de disfrutar de la familia y asistir a la iglesia para dar gracias a Dios por su sacrificio.
Los jóvenes varones, no eran capaces de faltar el respeto a sus padres viéndoles fumar o tomar ni siquiera una cerveza mucho menos licor, y hoy en día a esto las nuevas generaciones; le llaman confianza y los padres creemos que al permitírselos estamos creando lazos de amigos con ellos.
Durante Navidad éramos felices organizando las posadas, comiendo colaciones, tamales, y atole y si la familia que la realizaba tenía la facilidad proveía una piñata para la diversión de los niños y adultos. Hoy en día si no hay droga, licor, etc.… no hay razón para reunirse.
Y como estas muchos de nosotros podríamos mencionar tantos momentos de alegría y gozo en la familia.
Adonde han quedado todas esas actividades sanas que nos hacían reír.
Por anos escuche, LA FAMILIA LA BASE DE LA SOCIEDAD; pero veo tantas familias disfuncionales, por el abandono, la infidelidad, las drogas, o aun ALGO PEOR EL EL CRIMEN.
Los maestros no eran capaces de levantarse en huelgas, como en la actualidad se hace; no eran capaces de faltar a un día de sus labores ni aun por enfermedad a menos que esta requiriera hospitalización.
Recuerdo que en ellas habían un compromiso moral y ético tan fuerte por sus alumnos y sus padres. A diferencia de hoy estas personas que ocupan el lugar de los padres por gran parte del día, pues son los que ensenan e instruyen a nuestros hijos; son capaces de cometer grandes atrocidades como son el abuso sexual y maltrato físico. Y la pregunta esta en mi cabeza; quien tiene la culpa? Las autoridades? La sociedad? perdón pero no lo olviden que nosotros la familia somos la base de esta, por lo que entonces dedujo que nosotros somos los culpables.
No digo que la corrupción en las décadas pasadas no existiera, pero hoy no solo es motivo de verrgüenza bien parecería ser de competencia, EL MAS CORRUPTO, EL MAS PODEROSO.
Sera que es demasiado tarde para recuperar esos valores? Ese amor a la familia?, al padre, a la madre, al abuelo, y porque no al vecino? Y aun más EL TEMOR Y LA FE EN DIOS.
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